"Con L de Enfermera" (#conLdeEnfermera) es una iniciativa
desarrollada en las redes sociales para dar a conocer las dificultades a las
que se enfrenta el enfermero novel, tanto al terminar la diplomatura, como cada
vez que cambia de contrato y de puesto de trabajo.
Todos hemos
empezado cosas nuevas y hemos sido "aprendices" alguna vez. Es más, continuamente
somos noveles en infinidad de tareas. ¿Pero
somos conscientes y nos acordamos de estos momentos cuando recibimos a un nuevo
compañero de trabajo?
No
se me ocurre decirle a un profesional de Enfermería cómo tiene que hacer su
trabajo. Antiguamente la labor de Enfermería se escondía bajo la sombra de la labor del médico. Hoy en día sus roles y los del médico están definidos perfectamente. Más que caminar uno detrás del otro, diríamos que vamos de la mano, coordinados y complementados. Además,
ha habido un cambio de paradigma en las funciones del enfermero. En la
actualidad son expertos en prácticas de excelencia, participan de
manera activa en la tomas de decisiones, forman parte de comités, elaboran protocolos
e indicadores de evaluación, y cada vez se implican más tareas de gestión,
investigación y formación.
No obstante, en ocasiones nos falta paciencia hasta que
el profesional de enfermería adquiere y disfruta de todas estas habilidades y
competencias.
Es normal que un
enfermero novel formule más preguntas. Necesita una información muy clara sobre diagnósticos, planes de tratamiento, cuidados y medicamentos, sobre todo si no está familiarizado con los protocolos de actuación. Cuando nos dirigimos a un enfermero veterano a veces omitimos información crucial, damos por sentado que ya lo sabe. También es normal que nuestro nuevo compañero se sienta inseguro y que pueda
tardar un poco más en hacer su labor. La poca paciencia y las prisas con las que andamos siempre, hacen que vayamos directamente a contactar con el enfermero veterano. Deberíamos dedicar un tiempo suficiente para comunicar la información que es importante, y que se hagan y se respondan las preguntas necesarias. Parece
mentira que no nos acordemos de nosotros mismos hace unos años.
Y lo que es muy importante también, ¿lo hacemos sentir como parte del equipo? ¿Sabemos si va
a estar mucho o poco tiempo con nosotros? ¿Sabemos dónde se formó y si tiene
alguna experiencia con la especialidad? ¿Le ofrecemos nuestra ayuda?
Porque todos hemos llevado la "L" alguna vez, y la seguiremos llevando.
He querido rescatar unas fotos que tenía del año 99, mi primera sutura en Urgencias. Es difícil describir la satisfacción de ese momento: piensas que tienes unos años maravillosos para aprender, compartir y crecer.
Porque todos hemos llevado la "L" alguna vez, y la seguiremos llevando.
He querido rescatar unas fotos que tenía del año 99, mi primera sutura en Urgencias. Es difícil describir la satisfacción de ese momento: piensas que tienes unos años maravillosos para aprender, compartir y crecer.
Años más tarde, cuando terminas la especialidad y quieres huir de contratos temporales y guardias aquí y allá, te encuentras metiendo tus cosas en un Ford Fiesta, cogiendo un ferri y yendo a trabajar a 1.500 km de tu casa. ¿Esto es lo que llaman salir de la zona de confort? Nadie me había advertido de eso...
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